En el marco de la apertura de la Semana Cesco, que reúne a los principales actores de la minería, insistió en su rechazo al proyecto que busca subir el impuesto a la actividad.
Destacando que “la industria minera no ha parado ni un solo día durante la pandemia”, el biministro de Minería y Energía, Juan Carlos Jobet, abrió este lunes la Conferencia Mundial del Cobre, evento que se realiza en el marco de Cesco Week Santiago 2021 y que reúne a los principales actores del sector minero a nivel global, la que se realizó de forma telemática.
Si bien los observadores internacionales pronosticaron una caída del 10% en la producción de cobre, el secretario de Estado aclaró que “cerramos el año pasado con 5,7 millones de toneladas, casi la misma cantidad que en 2019”.
“Este año, esperamos llegar a más de 5,9 millones de toneladas y para el 2022 superar los 6 millones”, sostuvo, agregando que la actividad de exploración el año pasado aumentó notablemente 14%.
Bajo ese escenario Jobet recalcó que “hoy fortalecemos nuestro compromiso de convertirnos en uno de los mejores distritos para la minería verde y sostenible”. Para construir esa sustentabilidad, dijo, es fundamental incrementar y comunicar de manera más persuasiva los aportes que la minería hace a la sociedad. “Ninguna industria puede prosperar a largo plazo si las personas no comprenden ni valoran lo que hace”, afirmó.
Según explicó, la primera de esas contribuciones, especialmente durante una crisis económica, son los empleos y las inversiones, objetivo donde la minería de Chile está haciendo su parte. De acuerdo al Ministerio, empresas estatales y privadas, actualmente cuentan con 19 proyectos mineros que ya están en ejecución o están iniciando construcción en los próximos dos años. Esos proyectos desplegarán aproximadamente US$ 5 mil millones de inversión en la región de Tarapacá. Otros US$ 5 mil millones en Antofagasta y más de US$ 4 mil millones en Atacama.
Pero Jobet también se dio el tiempo de reiterar la posición del gobierno frente al polémico proyecto de royalty minero que se discute actualmente en el Congreso. “Permítanme ser muy claro en esto, ya que actualmente se está discutiendo una moción inconstitucional en el Congreso sobre una posible regalía. Nuestro gobierno no apoyará esa idea”, enfatizó.
Y agregó: “Creemos que la estructura de este impuesto minero específico actualmente en vigor es adecuada y que la mejor manera de aumentar los ingresos gubernamentales de la minería es aumentar la producción y mejorar la competitividad. Esa es nuestra principal motivación para poder suministrar el cobre que el mundo demandará en los próximos años”.
La autoridad reforzó que la estimación de inversión para el período 2020-2029 es más de US$ 74 mil millones y la minería hace una contribución importante a través de los impuestos. Según dijo, el año pasado aportó más del 6% de los ingresos fiscales de Chile y ese número llegó al 34% en 2006, durante el llamado superciclo y volverá a aumentar este año a medida que el impuesto específico a la minería y el impuesto sobre la renta de las sociedades aumenten la recaudación del gobierno cuando los precios y por lo tanto las ganancias se incrementen.
Oportunidad del precio del cobre no es solo financiera
De acuerdo a Jobet, se prevé que la demanda de cobre para 2021 llegará a 23,9 millones de toneladas, un 3% más que el año pasado. Mientras, sobre el precio del cobre, aunque se ha visto un repunte, precisó que se debía mantener la cautela.
Para el secretario de Estado, el crecimiento que se esperaba para la economía mundial hace un par de meses para este año y el próximo se ha retrasado un poco por la perseverancia de los contagios. Sin embargo, el mercado del cobre es muy ajustado, especialmente el de los concentrados, y esperan que el precio se sitúe en torno a su nivel actual, al menos durante la primera mitad del año.
A pesar de esto, advirtió que la oportunidad que ofrece el aumento esperado de la demanda y los precios no es meramente una oportunidad financiera, de generar más ganancias, sino mucho más que eso. “Es una oportunidad única para que la minería del cobre muestre el aporte que puede hacer al mayor desafío al que nos enfrentamos, el cambio climático, y por lo tanto, mejorar su legitimidad y fortalecer su licencia social”, enfatizó.
“Todos sabemos que no podremos reducir lo suficiente las emisiones de CO2 sin las energías renovables y el transporte eléctrico. Dado que ambos requieren mucho cobre, la conclusión es evidente. No podremos detener el cambio climático sin la minería del cobre. Nuestra contribución a la reducción de emisiones también vendrá desde dentro de las operaciones mineras”, añadió.
En esa línea, señaló que la minería sostenible significa reducir su propia huella de carbono y que Chile adoptará de manera decisiva una estrategia que permita a sus empresas mineras lograr una red de inversión verde. “El sector minero ha sido clave en la transformación energética y se espera que para 2023 ya cuente con 60% de suministro de energía renovable”, dijo.
El hidrógeno verde fue otro tópico que puso en el debate. Considerando que se está trabajando en una estrategia para que Chile se convierta en el productor de hidrógeno verde más barato del mundo para 2030, indicó que ésta es una doble oportunidad para la minería. Primero, porque permitirá la descarbonización de sectores más difíciles de electrificar, como los camiones mineros.
“Actualmente estamos trabajando con empresas mineras, incluidas Codelco, Anglo American, BHP Antofagasta, CAP, Collahuasi y otras para probar soluciones de hidrógeno para el transporte. En el futuro, esperamos explorar la transición de la gasolina al hidrógeno en otros procesos como la fundición”, puntualizó.
Pero también, siguió su explicación, “es una oportunidad para que la minería muestre cómo puede ser un catalizador en el surgimiento de una nueva industria renovable verde que tendrá un impacto enorme en el desarrollo de nuestro país, otra forma de ganar legitimidad”.
En cuanto a las iniciativas en curso, comentó que recientemente comenzaron la consulta sobre el plan nacional de relaves cuyo objetivo general es abordar los riesgos ambientales y de seguridad. Además, recordó que están desarrollando una política minera nacional para los próximos 30 años, la que planean presentar durante el tercer trimestre de este año. De acuerdo al cronograma establecido por el Ministerio, la aprobación de la iniciativa se concretaría entre agosto y septiembre, para luego ser exhibida.
Asimismo, también se están realizando esfuerzos en otras formas de residuos, incluidos los neumáticos. “Para 2023, las empresas deberán recuperarlas y reciclarlas progresivamente y para 2030, los neumáticos de minería deberán reciclarse al 100%. También surgirán nuevas oportunidades de la exploración rentable de residuos mineros de sobrecarga y relaves con valor económico. La reutilización de material extraído cuando las concentraciones eran más altas y las tecnologías menos eficientes es una oportunidad prometedora, un movimiento hacia una economía circular y operaciones más sostenibles que apoyaremos firmemente”, insistió.
Y sentenció: “Chile está tomando las medidas necesarias para asegurar la continuidad de las operaciones mineras y contribuir a una industria y una economía más sostenibles”.